Todas las mañanas me grito al oído
Tengo que volver al olvido de donde nunca debiera haberme
ido
Me despido de auténticos desconocidos
Viajo como todos; solo en el colectivo
Torpemente describo el oxímoron matutino
Combino vocablos tácitos en pos del sonido
Llevo los cascos, bamboleo, sonrió
Ninguno llega a mago por un truco fortuito del destino
Estudio el entorno con el telescopio bolígrafo
Almendras al rojo en el cráneo poético
Andar, ando, cojo según decida cupido
No le aflojo, busco entre lo descubierto, miro
Me encantan los culos de cerebro esculpido
De genero tonto, de colores vestido
Ese soy yo, el del espejo perdido
Ey señor! Los Uds traen regalito, ritmo
Flores a los locos y a los chanchos el tocino
También gordo como el mejor farmacéutico céntrico
Este es mi deporte caminar mientras escribo
Visitaré al Colo el amigo de los huevos de acero quirúrgico
Hablaremos de todo, incluido el silencio
Al filo del sofoco mencionaremos temas densos
El peso del “nosotros” es cero sin testículos
La mas de los otros nos sindica de distintos
Suyo firmo flojo, digo corto, me despido