Era líquido del cielo lo que veía
Eran vidrios cayendo y astillas
Era el pasto bebiendo sonrisas
Los espacios color tierra viva
Que aros vendía lagunilla
El cartón era blando como una galletita
El papel arrugado de la poesía recogida
En el gris del asfalto, el oleo un artista
Hubo ríos de barro, arenas movedizas
El brillante espectáculo de las estrellas de día
El viento rayando la gravedad de la óptica
Algunos humanos bailando debajo con algarabía
Pero más escapando, imitando las hormigas
Hasta pájaros cantando confundiendo a las viejitas
Un millón de enamorados pescaban neumonía
Los abrazos eran toallas calentadas con caricias
Entendí su cama balsa, ningún hombre es una isla
Que con ella de chaparra, chaparrón era Matías
Que mientras el mundo tenga agua amaré a Valentina
