Dial Lecto

Ese enojo permanente de tantas personas Transforma en vinagre la sangre, se nota Las comisuras caen como la noche, opacan Quizás crean que brillan en sus ataques de furia Desde el de genero imagino secas las conchas El flan representado en porongas La casa limpia y el alma sucia Las ansias turbias, las ganas truncas Además, deben de ser quienes censuran Sin dones, condones, forros, basuras ¿Cuáles son los dioses a los que les hacen preguntas? De los tres mosqueteros el cardenal o los curas El padre de Romeo, la madre de Julieta Parecen ignorar que el sol en cielo ya vale la sonrisa Resta explicar hacer docencia de la otra idea Si es que su forma les hace mal, parece que sufrieran

Voy a la luna, han hecho la noche A por aceitunas, aceite A dar de caderas, el baile Al calor de las sonrisas, amistades Voy a provocar estrellas, fugaces A abusar de almendras, visiones A utilizar las palabras, mis dulces A intentar que se abran, las mentes Voy a aullar melodías, canciones A besar las copas, los arboles A animar la joda, boliches A rockearles de onda, Ustedes Voy a buscar el sol, amaneceres A por pelos en la almohada, tirones A chasquidos de las palmas, cachetes A imágenes acabadas, su goce

Renglón, párrafo, pagina Palabras de naturaleza bulliciosa Jaulas doradas para alojar ideas Dejarlas liberadas es un acto de valentía La lengua se nos traba en ciertas circunstancias Cuando el interlocutor no es pantalla respira Al momento de temer aguas, de dar las noticias Este oral no se traga, escupe música El sonido de la voz circunvala la fogata Oiga ¿será verdad? ¿será mentira? La búsqueda de la definición definitiva Acabado el túnel, el que aguanta la lampara O bien un discurso pobre, hecho de frases publicitarias Esto y mas cabe en una charla cualquiera

El no imponer libera Dejar de esperar o requerir obediencia Para colaborar ideamos sistemas Algunas tareas condicionan, algunas personas aceptan Así se regula el uso de la fuerza Por sobre la voluntad solo la capacidad propia Si alguien hemos de tocar será con licencia Es tan simple en realidad, sobra el poema Ya que estoy acá es probable que siga Solo dos mandamientos, es chica mi iglesia Nada de ordenar, permiso caricias Para el acuerdo es fundamental el uso de la lengua Traduzco ¿queres? Vamos a culear Hagamos del amor, de la paz, tremenda sinfonía Puesto el foco en la bondad palidecería lo capitalista Dado que empresas hemos de formar en pos de la grandeza Ese paradigma debería de cambiar desde el papel moneda Poderoso Caballero las pelotas, con dos manos exclamo ¡esta! No es comprar mucho sino convidar Y al ser nadie tuyo eso se generaliza Parece que este papelucho es uno de los mapas de la felicidad Donde el diablo e

Reemplazados los brazos por lagrimas Sin colgar de ninguna rama El desafío de volver a confiar El dolor viene de las sabanas La ansiedad por follar y acompañar ¿Dónde han escondido la bondad? Cambiado el futuro por bastas Decidido a doblegar a fuerza de sonrisas A llorar en voz muy baja Encontrarle un final a la búsqueda Ir a por la libertad a lo canga Las cosquillas de la convicción intelectual Trocado el final por un volver a empezar La desesperación convertida en experiencia La miel hecha de miradas, cejas laxas Orejas sin llave, puerta de entrada Pupilas destinadas a conectar palabras El final termina siendo magia, abracadabra

Mas que pobre soy negro Los rulos enredos El dios de los puercos Gemidos de esfuerzo Pisón rompe culos Los brazos entrego Recelo los rubios Hermosos obreros Toditos los músculos Las negras ¡que digo! Los pelos eructo Conformamos colectivo Así gira el mundo El gesto solidario La ayuda es rumbo La cumbia del ritmo Sonrisas de abrigo Abrazos de amigos No somos oscuros Es claro el discurso Aquí contra el frio El amor sobretodo

Cortar un jazmín de camino a la parada Empezar siendo feliz hacia la parada Llegar justo cuando el colectivo arriba La vida es tan ying como yang y amiga Lejos del punto entonces en la vastedad del alba Al borde del vórtice del huracán de mi locura Es jueves en una urbe tan gris como oficinas La música coordina mis sonrisas Los arboles casi se desnucan desde mi ventanilla Siempre es ahora o nunca, puede que mañana no exista Cuando vamos a cantar victoria solo con verla El equilibrio lleva a la estabilidad y no cobra El cielo es la bandera usada en guerra Por un instante el aeropuerto es mi cabeza ¿los piojos? Muertos, la juventud no regresa La ciudad un remolino atrapando gente buena Por eso vengo colorido a romper la rutina Gurú de mi destino de poemas de plazoletas La rotonda es el mundo mismo, la salida es la izquierda Lo que devino en anodino es para ponerle onda Una vez quebrado el tedio suena la sirena Hacia el ocaso, en un monte chic