Tenía un poema
Atragantado en la yema
De un huevo
Iba saltando
Abandone la cocina
Sin ser cocinero
Para ir a la oficina
Del único bar abierto
A colmar de cafeína
El cerebro
A marear con marimba
Los intentos
De rimar poesía
Cuando he muerto
Y enterrado en la angustia
No despierto
Mi soledad es ninguna
Mas son cuerpos
Si le canto a la luna
Ladran perros
Me asusto
Voy a la cucha
No me duermo
Empieza otra lucha
No hacerlo
No me escucha
Sudo, tiemblo
Mil preguntas
de agorero
¿Y si nunca?
¿Y si no quiero?
me gustó.
ResponderEliminarEs un orgullo entonces!
ResponderEliminar